LA VOZ

En el siguiente pasaje Jesús clama al padre “Padre, sálvame de esta hora” refiriéndose al padecimiento que le esperaba en la cruz y en ese instante Dios se hace presente como una voz.

Leamos y reflexionemos al respecto

Juan 12:27-30 “Ahora mi alma está turbada, ¿y qué diré? ‘¿Padre, sálvame de esta hora’? Pero para este propósito vine a esta hora. Padre, glorifica tu nombre.” Entonces vino una voz del cielo que decía: “Lo he glorificado y lo glorificaré de nuevo”. Por tanto, la gente que estaba allí y lo oía, decía que había sido un trueno. Otros dijeron: “Un ángel le ha hablado”. Respondió Jesús y dijo: Esta voz no ha venido por mí, sino por vosotros.”

VER:

¿Que pidió Jesús al Padre?

¿Cómo Dios se hizo presente en ese momento?

¿Por causa de quién vino la voz?

JUZGAR:

¿Quiénes escucharon la voz?

¿Cómo interpretaron algunos la voz de Dios?

¿De quién era la voz?

¿Si la voz era para la multitud, porqué no pudieron escucharla claramente?

ACTUAR:

¿Escuchas la voz de Dios o eres parte de la multitud que sintieron la presencia de Dios, pero no la distinguieron?

¿Alguna vez la voz de Dios te ha guiado? comparte con el grupo

¿Qué recomendarías a otras personas para que escuchen la voz de Dios? ¿Tú lo haces