CÓMO RECONOCER LA GUÍA DEL ESPÍRITU SANTO
Nuestro padre celestial no únicamente se conforma con darnos a conocer los planes de su reino, sino que pone en nosotros el "motor" que hace posible que vivamos dentro de los mismos sin que nos cause fatiga y tristeza, pues su mayor deleite es vernos disfrutar de todo lo creado en plenitud de vida. En función de ello es que nos ha repartido dones y talentos.
Una cosa es saber acerca de lo que el Espíritu Santo de Dios hace en nosotros y la importancia que tiene el ser guiados por El todo el tiempo, y otra muy diferente, el poder diferenciar o reconocer, en medio de todas las "voces" que escuchamos, su guía y dirección en nuestro diario vivir. Para ello necesitaremos usar los siguientes elementos que nos ayudarán a desarrollar una estrecha relación con el Espíritu Santo: LA PALABRA DE DIOS, LA ORACIÓN CONSTANTE, LA ADORACIÓN Y ALABANZA, LA COMUNIÓN CON HERMANOS Y HERMANAS DE EDIFICACIÓN. Sólo así podremos conocerlo, reconocer su voz en medio de sueños, visiones, etc.
Identifiquemos los siguientes puntos a continuación:
1.- El Espíritu de Dios nunca nos guiará en una dirección contraria a la palabra y sus principios, ya que siempre su principal intención será llevarnos a vivir dentro del diseño de Dios aún cuando a nuestra alma (pensamientos, sentidos, emociones) y cuerpo les incomode. De hecho, él mismo nos dará la fuerza necesaria, la inteligencia, la fe, el amor, la sabiduría que necesitemos. 2 Timoteo 1:6-7 ; 1Corintios 2:13 ; Juan 16:12-14
2.- El Espíritu Santo siempre buscará edificarnos, animarnos, levantarnos, consolarnos. Por tanto, cada palabra o acción que proceda de él, será siempre en este sentido. Romanos 8:26-27
3.- El Espíritu Santo nos lleva no sólo a identificar las obras de la carne, sino también a darles muerte en nuestra vida a través de la obediencia.
4.- El Espíritu Santo nunca nos esclaviza al temor. Romanos 8:15
5.- El Espíritu Santo siempre confirmará y dará seguridad en cuanto a nuestra identidad y propósito en Cristo Jesús. Romanos 8:16-17
6.- El Espíritu Santo siempre nos lleva a ver lo bueno, lo puro, lo santo, lo de buen nombre, en todo momento y circunstancia.
7.- El Espíritu Santo nos muestra cada detalle del amor del Padre Dios hacia nosotros. Romanos 8:38
8.- El Espíritu Santo siempre nos da valentía para tomar decisiones en la vida Romanos 8:31 y 37
9.- El Espíritu Santo manifestará sus frutos en nuestra vida. Gálatas 5:22
10.- El Espíritu Santo cuando toma el control de la vida de la persona, lo primero que afecta es su "lengua" (hablar las maravillas de Dios Hechos 2:4) (Hablar con denuedo la Palabra de Dios Hechos 4:31). Santiago 3
11.- El Espíritu Santo nos lleva a tener una intimidad profunda con Dios.
12.- Espíritu Santo satisface todas nuestras necesidades Isaías 58:11
Recordemos algo muy importante; el elegir vivir bajo la guía del Espíritu Santo es parte de nuestra libertad. Es decir, el vivir bajo el gobierno de Dios es nuestra decisión.
ADVERTENCIA
Hay una gran diferencia entre ser una persona "almática" y ser una persona "espiritual".
ALMÁTICO ESPIRITUAL
-Se guía por sus emociones, sentimientos -Se guía por la Palabra de Dios y no por
y pensamientos. sus “sentimientos”
-Actúa agradándose a sí mismo. -Actúa agradando a Dios
-Piensa que las sensaciones externas le -Actúa por fe aún cuando no hayan
acercan a Dios. (Gritos, desmayos, etc.) sensaciones externas.
-Piensa que su instinto natural es suficiente -No toma decisiones sin la guía del Espíritu
para tomar decisiones.
-Depende de sus propios esfuerzos. -Depende completamente de Dios.
En conclusión, el Espíritu Santo nos lleva a:
Amar y deleitarnos en nuestro Padre Dios.
Ser transformado de gloria en gloria a la semejanza de Cristo
Ser ungido y lleno de poder para el trabajo del ministerio
Estar fortalecido para resistir las pruebas
Ser portadores de la gloria de Dios a fin de cambiar atmósferas de acuerdo a su diseño.